Susana Zanetti solía citar a Ángel Rama quien, recordando la misión de la crítica, decía: “Ocurre que si la crítica no construye las obras, sí construye la literatura, entendida como un corpus orgánico en que se expresa una cultura, una nación, el pueblo de un continente, pues la misma América Latina sigue siendo un proyecto intelectual vanguardista que espera su realización completa”. Estas palabras, dichas en 1982 por Rama y reiteradas por Zanetti en 1999, depositan en la crítica la responsabilidad de organizar este archivo en movimiento hasta el encuentro de nuestra expresión, dentro del círculo de potencialidad trazado por Pedro Henríquez Ureña en la década del 40. La literatura latinoamericana es así concebida como una acción incompleta y supeditada a la realización de otro orden, extraliterario, que es el continental. Los trabajos aquí reunidos entran en diálogo con esta gran tradición crítica latinoamericana y con las tensiones actuales de ese campo para volver sobre la materia (literaria) y la convicción (continental) hoy asediadas por tantos factores disolventes. El viaje fue la brújula inicial de los autores y, por lo tanto, uno de los motivos articuladores de la mayoría de las reflexiones, aunque no el exclusivo, ya que a partir de él se despliegan otras operaciones de traslación. Por eso, en este libro se traza un posible itinerario diacrónico, desde la conquista hasta la modernidad, para hacer escala en momentos y zonas nodales de este proceso. El viaje opera entonces en dos dimensiones, como tipo discursivo, pero también en un nivel metafórico, como signo de intersección e interacción, de trasiego y transformación de esta literatura.